El que un vídeo que pretendía ser una felicitación navideña fuera tomado por muchos (incluido el que escribe) como una inocentada nos da una idea de la reacción que ha provocado el videoclip musical ‘‘ elaborado por un grupo de empleados de la conocida marca y NB producciones. Ambos se están enfrentando desde la fecha de publicación del mismo a un aluvión de críticas en las redes y medios sociales que han generado una auténtica crisis de reputación online para el grupo de tiendas de ropa (del que por cierto soy cliente). El vídeo tiene carácter corporativo, ya que se encuentra en la cuenta oficial de del , aunque sintomática y previsiblemente se hayan deshabilitado los comentarios del mismo.
¿Qué es lo que ha causado tanto revuelo? Quizás el hecho de que si el branding de la moda va normalmente asociado a conceptos como diseño, glamour, creatividad, belleza y elegancia, el vídeo de los empleados del Grupo Cortefiel hace ‘anti-branding’ con un estilo y una ejecución que han sido calificados de ‘cursi, cutre, espeso, poco serio, una broma de mal gusto’ y otros calificativos similares, todos apuntando a la misma realidad: que resulta increíble que un vídeo que parece más propio de la cena de empresa después de haberse tomado unas copas se haya convertido en la felicitación navideña oficial de un grupo de tanto prestigio.
Imagen del vídeo 'Así es un día en el Grupo Cortefiel'
Cortefiel se ha metido a sí mismo un gol por toda la escuadra, y muy flaco es el favor que los empleados participantes han hecho a su colectivo con el vídeo de marras. ¿Qué es lo que ha llevado a este estado de cosas? Se me ocurren dos explicaciones: o bien el deseo de crear un vídeo que fuera viral a toda costa, o bien – y muy en la línea de lo que hemos visto últimamente con los ‘Harlem Shake’ – el de crear un vídeo simpático que humanizara la marca con la participación directa de los empleados en un contexto informal y desenfadado. Tristemente, la barrera entre simpático y ridículo es muy fina, y el video del Grupo Cortefiel y NB Producciones lo traspasa en más de una ocasión (véase la foto de arriba).
Nuestras grandes marcas siguen cometiendo errores de bulto, muchas veces – como creo que ha sido el caso aquí – con la mejor de las intenciones. Qué triste que cuando se cuentan con los recursos necesarios, estos no se empleen en lanzar mensajes de marca coherentes sino que se malgasten las oportunidades en empresas como las del fallido intento de Cortefiel. Los empleados del Grupo parecen haberse divertido con la elaboración del vídeo: su audiencia nos seguimos preguntando por qué se han empleado con tanto ahínco en un ejercicio de anti-branding que hace que nos preguntemos si en su empresa existe el criterio y la inteligencia suficientes para la gestión de su propia imagen. Confiemos en que hayan aprendido la lección.
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Actualización 4 de Enero 2014: Cortefiel – obviamente ante el aluvión de críticas – se ha visto obligada a reaccionar y ha cambiado el título del vídeo, que ya no es la felicitación navideña sino que ahora aparece en su canal de (¡atención!) como ‘Vídeo musical para la proyección en el aperitivo de Navidad del Grupo Cortefiel‘. También se ha incluido un largo párrafo justificatorio sobre por qué se ha elaborado el vídeo y se han habilitado los comentarios. ¿Os parece esta modificación una medida acertada? ¿Creéis que hará que se acallen las críticas, o que por el contrario sólo la retirada definitiva del vídeo lo conseguirá? Y, por último ¿os parece que la ‘Carmen Martín’ que leéis en los comentarios – según sus propias palabras ‘sin LinkedIn, ni Twitter’ – es una persona real, o una infiltrada de Cortefiel directamente implicada en el video?
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El pensamiento positivo ha sido la tabla de salvación a la que nos hemos agarrado muchos de nosotros para superar algunas de las circunstancias más difíciles de nuestras vidas. Pero su importancia y relevancia van mucho más allá de una mera solución pasajera. De hecho, podemos afirmar con toda autoridad que sin una aplicación constante y decidida de sus principios y prácticas son prácticamente nulas las posibilidades de que desarrollemos nuestro potencial y alcancemos nuestros objetivos tanto en el mundo físico como – en el caso en el que aquí nos ocupa especialmente – en el virtual. Y esto es así a un nivel tanto meramente individual como sin duda organizacional. Como la reciente crisis ha demostrado, las organizaciones y empresas que se dejan dominar por el miedo y no se alinean con una filosofía positiva son las primeras en ser superadas por sus competidores y quedar atrás en la cuneta.
La popularidad del pensamiento positivo y del optimismo están establecidos por los múltiples libros y cursos de autoayuda que inundan las estanterías de nuestras librerías (sin duda muchos de ellos de dudosa calidad); su eficacia demostrada y demostrable ha sido sin embargo avalada por la psicología clínica y por sus mejores expertos. Citaré como un ejemplo entre mucho a la Dra. Suzanne Segerstrom de la Universidad de Kentucky. En su obra , ha utilizado los resultados de su propia investigación y evidencia experimental con rigor científico así como la de multitud de otros estudios para demostrar cómo el optimismo impulsa y espolea a la acción y es una mejor táctica en el cien por cien de los casos independientemente de las situaciones vitales de cada cual. Mientras los pesimistas siguen debatiendo si sus metas son alcanzables o no, los optimistas ya estamos haciendo algo al respecto para conseguir las nuestras. Esa es la gran y fundamental diferencia. Por eso una actitud positiva es siempre un excelente punto de partida.
La psicología positiva tal y como ha llegado a nosotros en este siglo XXI es heredera de los pioneros del New Thought americano de finales del siglo XIX y principios del XX, muchos de los cuales eran personas profundamente espirituales como Charles y Myrtle Fillmore, los fundadores de Unity (los que queráis recibir vuestra dosis diaria de pensamientos positivos, podéis suscribiros o bajaros la App de ‘La Palabra Diaria’ desde una perspectiva espiritual metafísica – es decir, no mítica – y profundamente liberal e integradora). Pero fue sin duda la figura de Norman Vincent Peale con su bestseller ‘‘ de finales de los 50 la que catapultó a éste a un fenómeno de masas y popularizó las ideas y conceptos de los pensadores metafísicos como Charles Haanel, Wallace Wattles y otros. Desde entonces, el interés por la psicología positiva no ha cesado, como demuestra el reciente bombazo editorial que ha supuesto ‘‘ de Rhonda Byrne y que se nutre (con mayor o menor acierto) de algunos de los principios ya citados.
La marca personal o empresarial presente en las redes y medios sociales y la Web 2.0 tiene inicialmente la necesidad de posicionarse en torno a una serie de valores, establecer unos objetivos y después implementar la estrategia adecuada para conseguirlos. En todo este proceso, el pensamiento positivo es su mejor y mayor aliado. Es más, los profesionales que les ayudamos y acompañamos en la a veces difícil travesía hacia el éxito 2.0 muchas veces podemos determinar de antemano sus probabilidades basándonos en su porcentaje de optimismo. Por ejemplo, la formulación de objetivos específicos será más o menos ambiciosa dependiendo del nivel de optimismo, y una ausencia de positivismo y espíritu de superación como un valor identificable es siempre una señal de peligro.
Pero fuere cual fuere la situación específica de cada cual, la experiencia propia y ajena ha demostrado que los siguientes principios generales se aplican:
1) Necesitamos dosis diarias de motivación. Aunque es cierto que hay personas con una disposición más naturalmente positiva que otras, es tan falaz el pretender que vamos a mantener nuestro nivel de positividad tras los avatares de cada día como que vamos a seguir oliendo bien después de ducharnos indefinidamente. Por eso es imprescindible el ‘consumir’ mensajes positivos en las redes y medios sociales y hemos de agradecer a aquellos que nos animan y apoyan de forma expresa. ¡Cuánto los necesitamos!
2) La positividad atrae positividad. La negatividad hace lo propio con la negatividad. Sabemos que nuestro éxito siempre depende de los demás, y que por ello el networking es una de nuestras prioridades absolutas en los social media. Bien busquemos ‘consumidores’ de nuestros contenidos, clientes, compañeros, referentes o partners, no cabe duda de que nuestra huella energética – esa que desprenden entre otros (¡atención!) nuestro perfil en Twitter, nuestras actualizaciones en Facebook y no digamos nada el estilo y contenidos de nuestra página web – determinará en gran parte el tipo de seres humanos que atraemos y su interés en nosotros. Como bien recordaba Buddha, los que nos rodean – también en Internet y las redes sociales – pueden convertir nuestra vida en un infierno o en una experiencia apasionante. Por ello es fundamental que utilicemos a conciencia…
3) La facultad de la intuición. Es mediante la intuición que el Universo/Dios/la Energía Cósmica o cualquier otro nombre que queramos dar a la Realidad en la que todos vivimos y operamos nos va guiando precisamente a esas circunstancias, situaciones y personas que más nos pueden ayudar. En el online esto se manifiesta cuando una oferta o perfil ‘nos da mal rollo’; o todo lo contrario, cuando sabemos que hay por ejemplo perfiles de gente a la que debemos conocer y que nos van a ayudar por un sentimiento ‘intuitivo’ (scientia intuitiva que dijera el filósofo Spinoza) que a veces no podemos ni debemos racionalizar. Algunos de los ejemplos que citaría en mi caso personal en mi andadura online este año han sido , , , , , , , , , , o y tantas y tantas personas entrañables… ¿Y qué podría decir de las personas maravillosas a las que yo he atraído y que tantas puertas me han abierto? La intuición se puede y debe cultivar hasta convertirla en una de las grandes aliadas de nuestra vida que funcione de forma casi espontánea y natural.
4) La positividad no es sólo una actitud: es un modo de vida. El gran peligro del pensamiento positivo es el llamado ‘síndrome de Bahía Cochinos’: que al igual que le ocurrió al Presidente Kennedy cuando diseñó junto a su equipo la fallida invasión de Cuba en los años 60, ignoremos las dificultades y peligros a los que nos enfrentamos y creamos que el optimismo por sí mismo nos va a aislar o proteger de los problemas. Como bien suele repetir el gurú de la autoayuda Tony Robbins: “si en tu jardín han crecido hierbajos, no importa lo positivo que te sientas: hasta que no los arranques no van a desaparecer”. Nuestro marketing personal 2.0 se construye sin duda con una actitud positiva, pero desde nuestras competencias, destrezas y valores junto con las técnicas y tácticas más avanzadas y probadas sin atajos ni concesiones. No hay soluciones fáciles ni mágicas ni ningún resquicio para ‘ego-trips’: en Internet siempre será necesario avanzar con paso firme hacia una marca personal que represente lo mejor de nosotros mismos y nuestras potencialidades. Si convertimos a la positividad en nuestro modus operandi, sabremos enfrentarnos a los desafíos que la vida nos irá presentando paulatinamente desde una atalaya mucho más ventajosa.
5) Todo pensamiento tiene un efecto Los pensadores metafísicos que ya he citado fueron explícitos a la hora de enfatizar la importancia crucial de la conversación que mantenemos con nosotros mismos en nuestra mente, ya que esta termina configurando por activa y por pasiva nuestras acciones. Al examinar la huella digital de una persona o empresa, observamos el resultado de su estado interno como si fuera un espejo digital manifestado en el 2.0. Y es que como bien indicara Jesús de Nazaret en un versículo tan mal traducido como interpretado, ‘el Reino de los Cielos está dentro de vosotros’ (Lucas 17:20-21). Aquella persona u organización polarizada en torno a mensajes y valores esperanzadores termina manifestándolos en su realidad de maneras a veces insospechadas. Son las famosas ‘sincronicidades’ o ‘casualidades’ por todos de sobra conocidas y que apuntan a la unidad de todo lo existente en el Universo que nuestra Física hoy apoya y legitima. Es imprescindible focalizar nuestra atención de forma terca en lo positivo a pesar de las aparentes evidencias y pasar inmediatamente a la acción para convertir nuestro pensamiento en realidad tangible.
6) Nuestra huella digital es un termómetro de nuestra positividad. Me gustaría animarte a interrumpir un momento la lectura de este texto y a examinar tan desapasionadamente como te fuera posible tu huella digital. ¿Qué se desprende de ella? Ese es el termómetro por el que la gente que no te conoce de nada te va a juzgar y que les atrairá o alejará de ti. Atención: hay espacio para todo tipo de estilos – gótico, geekie, friki, casual, formal, heavy, gayer – y ninguno es esencialmente mejor o peor que ningún otro. Pero si desprendes pesimismo y malos sentimientos, ¿qué esperas atraer? ¿Y qué diremos de los CVs 2.0 que simplemente no dejan huella porque ni siquiera nos molestamos el dejar impronta en ellos de los valores que nos animan? Dime que tuiteas y te diré cómo piensas…
7) Los sueños se pueden convertir en realidad. La sinergia fe + motivación + optimismo hace que nuestros sueños se conviertan en realidad de una forma cuasi mágica que a veces es mejor ni siquiera intentar analizar. Los milagros de los que nos hablan los libros sagrados no son la violación de ninguna ley natural, sino precisamente la aplicación de la misma (¿para que tendría Dios o el Universo que interrumpir sus propias leyes? Además, ¿no indicó precisamente Jesús ‘es tu fe la te ha salvado’?). En el 2.0, el catálogo de sueños va desde emprender un proyecto exitoso hasta obtener un puesto de trabajo que nos autorrealice pasando por vender un producto o servicio del que nos sentimos orgullosos o convertirnos en referentes a seguir. He visto de primera mano como todos estos sueños se han hecho realidad cuando ese cocktail de ingredientes mágicos estaba presente. Si le añades un poco de talento al mix, el resultado es explosivo. ¡Pruébalo y verás!
Querido/a amigo/a: mi vida ha sido de todo menos fácil. No te aburriré con detalles de mi infancia o adolescencia traumáticas, la enfermedad crónica que sufro, y las penurias que he pasado como emigrante en dos países. Lo cierto es que cuando echo la vista atrás me sorprendo de cuántos sueños se han convertido ya en realidad y cuantos quedan todavía por materializarse. Como bien repitió Winston Churchill, nunca jamás te rindas. Puedes vivir la vida maravillosa con la que sueñas y las redes y medios sociales convertirse en el canal preferencial para que así sea. Lo sé y te lo transmito con plena convicción porque así ha sido para mí. Todo es posible. Todo está al alcance de tu mano. ¡Empieza a soñar y a trabajar ya! ¡Nos vemos en la cima!
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El 2013 está casi a punto de finalizar, y la apuesta que algunos hicimos por el Marketing Personal a finales del 2012 como nuevo paradigma que englobaría a la marca personal o personal branding así como “todo el conjunto de técnicas, tácticas y estrategias que podemos utilizar a todos los niveles para promocionarnos y conseguir nuestros objetivos personales y profesionales como individuos en la Web 2.0” ha dado sus frutos. A lo largo del año han sido cada vez más los compañeros que se han montado en el carro del Marketing Personal y que han realizado aportaciones notables y enriquecedoras desde perspectivas tan diversas como la reputación online, el SEO (caso de ) o el storytelling (caso de mi compañero de Soyunamarca).
Sin embargo, la evolución de la situación socio-económica y laboral que prevemos para el 2014 junto a las recientes modificaciones en el posicionamiento de Google y la propia evolución de la Web 2.0 en su conjunto van a hacer que las prioridades para un marketing personal exitoso vayan a resultar sensiblemente diferentes a las de este año a punto de concluir. Espero que el somero repaso que incluyo a continuación resulte de ayuda a todos aquellos que quieran aprovechar las vacaciones para aplicar el update correspondiente a sus estrategias y objetivos para el 2014.
Fuente: Flickr
1. Vamos a salir de la crisis. Este quizás sea el mayor de los cambios de mentalidad que todos necesitamos para el 2014 y años sucesivos. Todos los indicadores apuntan al inicio de una era de crecimiento y creación de empleo en el que vamos a disponer de más oportunidades y de un mayor optimismo a todos los niveles que hasta ahora. Es hora de ser más ambiciosos y más decididos en lo referente a los objetivos a alcanzar para nuestras marcas personales. El pensamiento positivo debe entrar a formar parte del nuestro modus vivendi y operandi dentro del contexto de una situación de mejora generalizada.
2. Vamos a ser más internacionales. Muchas de las oportunidades que se generarán en España tendrán que ver con mercados exteriores a los que tendremos que viajar y con los que tendremos que hacer negocios. El inglés es por ello más importante que nunca, y para muchos su marca personal deberá tener un carácter eminentemente bilingüe precisamente para estar lo mejor situados posibles en la parrilla de salida a esos mercados (mientras escribo este texto, por ejemplo, mi hermano se halla en Lituania instalando maquinaria industrial una semana). Atención por lo tanto a perfiles en LinkedIn, tuits en otros idiomas y cualquier otra acción explícita que actúe como un imán que sirva para atraer esas oportunidades. Para algunos (como el caso de mi hermano) será determinante.
3. El marketing de contenidos ha cambiado. Mucho se ha hablado a lo largo del 2013 respecto a la importancia e influencia del marketing de contenidos como punta de lanza de toda estrategia de marketing online. Parecemos estar asistiendo al ocaso de una era en la que el escribir o generar contenidos multimedia convertía a casi cualquiera en ‘experto’ o ‘especialista’ a otra mucho más sofisticada en la que el posicionamiento que un marketing de contenidos inteligente sin duda nos puede proporcionar deberá ir apuntalado por acciones y/o evidencias tangibles, que precisamente serán visibles gracias a…
4. Una Web más social que nunca. La conversación que se está produciendo sobre nosotros, nuestra marca y nuestras acciones online y offline cobra en importancia con respecto a los contenidos por así decirlo ‘estáticos’. Google sigue privilegiando a Google + y sin duda hemos de contar con una presencia estratégica y activa en los social media. Como dicen los norteamericanos ‘less is more‘ y va a primar una selección cuidadosa de espacios online con respecto al tan frecuente ‘estar por estar’. Aviso para navegantes: son finalmente los demás con sus conversaciones sobre nosotros los que van a validar nuestra marca, y no los meros contenidos por excelentes que estos puedan ser.
5. La persona cobra importancia con respecto a la organización. Las organizaciones parecen aparecer, mutarse y desaparecer a velocidad vertiginosa y casi por generación espontánea: lo que permanecen siempre son las personas. Así lo atestigua la reciente salida de y de su equipo del programa de Intereconomía en el que tuve la suerte de ser entrevistado: por mucho que la cadena se haya esforzado por mantener el formato, la salida masiva de los antiguos tertulianos y el equipo técnico con su nueva apuesta promete convertirse en el nuevo programa estrella de la TV deportiva en lengua española. Moraleja: las personas son los principales activos de las organizaciones. Tal y como predijo el gurú Charles Handy, las empresas del mañana se parecerán cada vez más a equipos de fútbol: su principal activo son siempre los ‘recursos humanos’. Por eso es tan importante para todos nosotros el configurar, fomentar, promover y comunicar nuestro marketing personal en un contexto tan propicio.
Los que trabajamos en planes de marketing personal sabemos de primera mano que estos resultan tan beneficiosos para los parados como para los grandes ejecutivos. Los principios finalmente son los mismos: alinear nuestra marca en torno a unos valores y un estilo que nos representen de la mejor manera posible en el mundo digital y asegurarnos de que nuestro mensaje llega a ese nicho de audiencia constituido por todos aquellos que más nos pueden ayudar a conseguir nuestros objetivos. Lo que ni el mejor de los profesionales de marketing personal podemos hacer es cubrir las carencias o falta de calidad de un trabajo. Por eso os extiendo a todos (y a mí mismo) una invitación a ser mejores en el 2014, desarrollando nuestras destrezas y habilidades en todo su potencial para mayor beneficio de nuestros clientes. De eso, al fin y al cabo, se trata.
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Un reciente estudio sobre las PYMEs españolas revela dos conclusiones sorprendentes y entrelazadas: que a pesar del aprobado que obtienen en equipamiento tecnológico, la mayoría suspende al aplicarlo al marketing online tal y como muestra la imagen de abajo. En concreto, las pérdidas estimadas por esa falta de iniciativa se traduce a la nada desdeñable cifra de €143.000 millones. Esta es la conclusión a la que la empresa Pitney Bowes ha llegado tras analizar los datos de varios estudios realizados en España, con motivo de la presentación de sus herramientas de marketing online pbSmartEssentials.
Las pequeñas y medianas empresas españolas se han puesto al día en equipamiento TIC (Tecnología, Informática y Comunicaciones), pero no están aprovechando estas herramientas para llegar a más clientes y generar más ventas. En concreto, más del 84.5% tiene conexión a Internet, aunque sólo el 55.5% tiene dispone de una página web. La mayoría cuenta con smartphones y tablets, pero sólo una de cada tres utiliza algún software de gestión de clientes (lo que se conoce por las siglas inglesas CRM) y el 45% reconoce que no cuenta con una estrategia de marketing online. El correo electrónico sigue siendo el principal (y a menudo único) instrumento de marketing digital para el 91% de las pymes. El resto de los canales son poco utilizados, debido sin duda al gran desconocimiento reinante en torno a lo digital: el 60% señala que sus empleados carecen de conocimientos y formación sobre esta materia.
Fuente: Pitney Bowles (2013)
Esto explica, por ejemplo, que solo un 42,7% de las pequeñas y medianas empresas disponga de un blog, que un 49% afirme que los móviles forman parte de su inversión en marketing, pero el 40% no tiene una versión móvil de su sitio web, y menos del 10% ha contratado alguna vez publicidad en buscadores. En cuanto al uso de códigos QR, solo los emplean el 16% de las empresas y el 68% los gestiona de forma interna, sin apoyo profesional. Un 10% de las pymes ve como una oportunidad invertir en soluciones móviles durante el año, donde solo el 8% dispone de una página web optimizada para móviles y un 7% desea invertir en soluciones de pago a través del móvil.
Fuente: Pitney Bowles
En este sentido, las PYMEs españolas contrastan con las de EEUU que utilizan exitosamente el marketing online y que ofrecen 9 razones demostradas por las que el social media marketing funciona, como he analizado en este post de Puro Marketing. Nuestra experiencia en Soyunamarca con PYMEs españolas de diversos sectores como la hostelería o el turismo avala la información aportada por este estudio. Si así es, ¿por qué las PYMEs no se centran más en el marketing? Las conocidas excusas de falta de tiempo y dinero están sin duda presentes, pero el gran problema de la priorización de tareas es muy a menudo responsable de que el rol de gestión de la empresa quede sumergido por las llamadas ‘tareas de bajo nivel’ como la limpieza, el mantenimiento o la compra de material de oficina.
Las PYMEs españolas necesitan de un decidido apoyo institucional. Es de agradecer, por ejemplo, que algunas de las confederaciones de empresarios regionales (citaré como destacadas las de y ) estén apostando en serio por ofrecer la mejor formación en marketing y redes sociales a PYMEs y emprendedores que tanto lo necesitan. Entre todos, podemos y debemos conseguir que el marketing online y las PYMEs dejen de ser una oportunidad perdida para convertirse en una sinergia ganadora.
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Muchos de aquellos que nos dedicamos profesionalmente de forma directa o indirecta a las redes y medios sociales nos hemos encontrado en la tesitura de tener que vender nuestros servicios o los de nuestras agencias. Para ello, es del todo necesario el presentar una oferta atractiva y atrayente que genere un mínimo de entusiasmo por parte de nuestros clientes. Nuestro primer objetivo es que al menos – sobre todo si nos toca hacer ‘puerta fría’ – nos den la oportunidad de explicar en persona cómo podemos aportar desde los social media y nos aseguremos de que reflexionan y se toman en serio nuestra propuesta.
Cuando vendemos planes de social media nos encontramos con algunas dificultades específicas de nuestro sector que hemos de sortear de la mejor manera posible: el gran desconocimiento de muchas empresas con respecto a las redes y medios sociales y el marketing online, la competencia desleal con los temidos y terribles ‘vendehumos’, el debate en torno al ROI y a cuál es la rentabilidad de una inversión en social media marketing y cómo medirla, etc. Además, existen otra serie de obstáculos que tienen más que ver con cómo presentar nuestra propuesta, entre los que destacan:
- Cómo utilizar nuestra experiencia previa y las referencias de clientes satisfechos
- Cómo paquetizar y flexibilizar nuestra oferta para que el cliente no tenga que ‘tragarla’ entera
- Cómo explicar los beneficios del social media marketing de forma amena y comprensible
Lo arriba indicado es sin duda un arte, y los que como nosotros en Soyunamarca tengáis la suerte de contar con una diseñadora de bandera como podréis añadir elementos de diseño y estética que sin duda serán de inmensa ayuda. Ello nos ayudará a establecer nuestra credibilidad, aunque está deberá estar apuntalada por un plan de social media marketing coherente y profesional. Especialmente a aquellos que no contais con mucha experiencia, os recomiendo vivamente la lectura del excelente de y al respecto. Pedro y María nos ofrecen pautas probadas desde su experiencia como consultores que haremos muy bien en aprovechar.
Pero una cosa es un plan y otro una oferta. La oferta o propuesta es, por así decirlo, la cara visible del plan: debe contener tan sólo aquellos elementos necesarios para ‘enganchar’ al cliente y que éste finalmente nos otorgue su confianza. El proceso puede ser automático (cuando la propuesta en sí misma haga que el cliente nos contrate) o sentar las bases de futuros encuentros y negociaciones (lo más común). La primera recomendación es que toda propuesta vaya acompañada de una lista completa de los servicios que ofrecemos: ésta última nos asegurará de que el cliente conoce todo lo que podemos hacer por él y contribuirá a que en una futura ocasión nos tenga el cuenta. No hay nada más frustrante que pasen meses antes de que el cliente se entere de que ofrecemos diseño y desarrollo web, marketing móvil u otros aspectos que no había inicialmente considerado pero que sin embargo necesita.
La propuesta en sí – normalmente en formatos PDF o PPT - debe ir focalizada a dar respuesta a las necesidades del cliente y a lo que sabemos que podemos hacer por él. Es importante que incluyamos de forma concreta los beneficios que esperamos que obtenga y los plazos de tiempo aproximados. Recientemente he escrito sobre 9 de los principales según una encuesta de 3.000 empresas que usan los social media en USA, que son por este orden los siguientes: mayor visibilidad, mayor tráfico hacia nuestro sitio web, un mejor conocimiento del mercado, aumento de la lealtad de marca, generación clientes potenciales (leads), mejora del posicionamiento, acuerdos y sinergias, reducción de gastos de marketing y por último (¡atención!) y tras un año el ansiado aumento de las ventas. Es nuestra responsabilidad el que el cliente comprenda que éste último punto – las mayores ventas – es una consecuencia a medio plazo de un buen plan de social media marketing y no es el único beneficio a obtener.
En propuestas de un cierto volumen y calado, la paquetización de ciertos servicios es del todo recomendable. Antes, habremos dejado claro qué elementos son opcionales y cuáles imprescindibles. Como botón de muestra, la formación y capacitación del cliente puede resultar esencial hasta un cierto punto y opcional en determinados temas. Por otro lado, una vez que el cliente disponga de los conocimientos y la experiencia necesarios, podrá asumir servicios como las gestión de comunidades sociales en todo o en parte. La flexibilidad casi siempre ayuda a nuestra credibilidad y muestra que nuestro objetivo último no es crear una relación de dependencia. Y, hablando de credibilidad, es importantísimo para que ganemos puntos en ésta que usemos casos de éxito propios y en lo posible sectoriales así como referencias de clientes satisfechos para ayudar a nuestra causa. Tan malo es en este sentido pasarse como quedarse corto, y la honestidad aquí como en todo es garantía ulterior de profesionalidad.
En cierto sentido, una propuesta de social media marketing es como un CV: debe siempre ir acompañada de una ‘carta de presentación’, que en nuestro caso es el email al que adjuntaremos los documentos pertinentes. Este es tan importante como la oferta de servicios en sí mismo, y debe constituir una introducción a lo que posteriormente desarrollaremos con más profundidad. Atención a los errores ortográficos y, si creas un mensaje-tipo, a enviarlo al cliente equivocado (creedme, a mí me ha pasado). Una vez más el objetivo del email es establecer nuestra credibilidad y generar interés, por lo que como norma recomiendo siempre incluir aquellos aspectos de nuestro CV y el de nuestra empresa que puedan ayudar de forma breve, directa y concisa.
Eston son algunos de los aspectos esenciales presentes en todas las ofertas ganadoras de social media marketing en las que he participado o que he observado. Agradeceré todas vuestras sugerencias y comentarios sobre cómo podemos mejorar nuestras ofertas y briefings de social media marketing para que sean más atractivas y convincentes para nuestros clientes. ¡Gracias anticipadas a tod@s!
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