La gran olvidada del Marketing Online


Como bien dice mi amigo , en marketing online ‘la conversión es la misión‘. ¡Y qué razón lleva! Independientemente del estilo u objetivos que tengas en Internet, la única manera de lograr resultados tangibles es a través de la conversión. Conversión en nuestro contexto no es claro está un acto religioso, sino el convertir a un visitante de tu sitio web o tu red social en un cliente. Cuando digo cliente no me refiero exclusivamente a una persona que compra un producto o servicio que nosotros vendemos, sino también a alguien que comienza a formar parte de nuestra audiencia y con quien a partir de ese momento debemos establecer una relación de intercambio de contenido, productos, servicios, herramientas y opiniones.

Bajo esta definición podemos afirmar que un visitante convertido puede manifestarse de muchas formas, como por ejemplo:

- Una persona que se suscribe a nuestra lista de correo o a nuestro RSS para seguir en contacto con nuestro contenido y valor agregado.

- Alguien que descarga algún material de nuestro sitio para ser ‘consumido’.

- El que compra algunos de nuestros productos o servicios (si disponemos de una tienda online).

- Aquel entusiasta que pasa más de x tiempo en nuestra página.

- Alguien que hace clic en la última promoción que publicamos.

- El solidario visitante que comparte algún contenido o realiza un comentario en nuestro blog.

- El que llena cualquier formulario destinado a establecer canales de comunicación con nuestra audiencia.

- Una persona que realiza una llamada a un número exclusivo para una campaña online.

A pesar de esta amplia lista de criterios, existen un número importante de ‘olvidados’ cuando hablamos de ‘conversión’ en objetivos tangibles que no somos sino los que no ‘vendemos’ nada directamente online. Y podría parecer a primera vista que, dado que nuestras transacciones comerciales se producen mayoritariamente en el offline, para nosotros internet y las redes sociales no poseen sino una importancia mínima o puramente testimonial. Y ello constituiría, como espero mi caso personal demuestre así como el de empresas que han conseguido mejoras significativas en la distribución de sus productos (por citar tan sólo un ejemplo), un gravísimo error.

Cualquiera que haya intentando vender servicios digitales a una empresa o individuo de este tipo habrá tenido que lidiar con una negativa en ocasiones frontal a realizar inversiones ni siquiera en diseño o desarrollo web (y no digamos nada en dinamizar espacios sociales o gestionarlos). Esto se suele traducir en las típicas páginas desangeladas y anticuadas que utilizan tecnologías y diseños trasnochados y que, aparte de no vender, causan en ocasiones un gran daño a la imagen de la empresa o marca en cuestión. ¿Y qué decir de esas horrorosas cuentas con el huevo de Twitter a las que ni siquiera algunos se molestan en añadir su logotipo o fotografía?

Una presencia online que no esté a la altura puede seriamente dañar la credibilidad de una persona u organización en un mundo cada vez más digitalizado en el que el punto de encuentro se puede producir online antes que offline. Que algunos sigan con una venda en los ojos al respecto está obviamente relacionado con el famoso debate en torno al ROI o retorno de la inversión. Resulta especialmente triste que a estas alturas del siglo XXI existan todavía personas que duden de la multitud de beneficios más allá de la conversión o venta directa en internet que nos puede reportar una estrategia online que se precie como la que aquí (junto a todo profesional 2.0 digno de tal nombre) defendemos.

Imagen: Flickr

 

La imagen de Mark Smiciklas lista algunos de los más relevantes, que van desde oportunidades de RRPP, hasta atención al cliente, nuevas relaciones o diferenciación y branding. Y es importante que todos los que vivimos de una forma u otra de la Web 2.0 insistamos en estos aspectos tan importantes y diferenciadores para una marca o empresa a los que siempre (repito, siempre) podremos sacarles eventualmente un beneficio tangible.

Cuando la conversión se produce total o parcialmente offline nos encontramos con el siguiente escenario: nuestra presencia y estrategia online debe apuntalar, apoyar, fomentar y promover nuestro esfuerzo comercial offline de forma que este último goce de la mayor credibilidad y fiabilidad posibles. Elementos como el branding, el construir marca o el contar con una audiencia predispuesta resultarán entre otros fundamentales. Y no olvidemos que pueden existir una serie de conversiones ‘intermedias’ como las que hemos descrito (descargar un PDF o entrar en una base de datos) que aunque no constituyen por sí mismas una venta allanan el camino hacia el objetivo final de un resultado económico tangible.

La conversión offline sigue siendo la gran marginada y olvidada del marketing online. Y a un precio muy alto. Toda empresa, organización o individuo que convierta offline tiene la oportunidad de mejorar sus ventas y modus operandi de forma significativa con un uso inteligente y avezado del arsenal de iniciativas que nos ofrecen internet y las redes sociales. Los múltiples beneficios que de ellas se derivarán compensarán ampliamente en muchos casos el esfuerzo y la inversión realizadas. Por ello hemos de continuar animando a personas y empresas a desarrollar estrategias integradas con tesón y creatividad que sigan demostrando la efectividad y el excelente retorno de la inversión del medio online ante ese núcleo duro aún instalado en un cinismo que la evidencia no justifica.

About the Author

Especialista en comunicación y marketing online y marca personal. Profesor de los Másters en Social Media y Community Manager de la Universidad Complutense y de la UNED y de la Escuela Universitaria del Real Madrid. Consultor en 'Soyunamarca'. Autor de 'De Twitter al cielo'. Aprendo, opino y comparto.


  • Luis Reyes Lopez

    El socialmedia no puede ser una estrategia aislada del mundo offline, muchos han de entender que todo ha de regirse por un plan de marketing general donde cada estrategia este relacionada ycon el resto y persigan el mismo objetivo.

  • http://ignaciofernandez-alberti.es/ Ignacio Fernández ALBERTI

    Hola Oscar,

    Es muy interesante lo que dices y estoy totalmente de acuerdo, casualmente ayer afirmaba de forma similar en un debate que iba por en esta línea. No puedo decir, ni mucho menos, que sea un experto en estas lides, tu sabes, pero si tengo buena visión comercial, y tengo claro que cualquier marca, personal o empresarial, que en este nuevo mercado quiera hacerse hueco, tiene que dominar ambos campos, online y offline, porque uno y otro actualmente son imprescindibles, y cualquier estrategia de Marketing debe pasar por ellos.

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  • Albert Mora

    Hola Oscar,

    Muy de acuerdo con el enfoque. La conversión es fundamental en el marketing online. Recientemente he escrito un ebook con ideas muy similares, te dejo un enlace por si te interesa leerlo:

    http://www.hisocial.com/hisocial/downloads/widget_show/594/?utm_source=download&utm_medium=hisocial&utm_content=download&utm_campaign=594

    • https://oscardelsanto.com/ Oscar Del Santo

      Gracias, lo descargaré!

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  • Pingback: Marketing de Atraccion 2.0, un regalo para tod@s | Oscar Del Santo

  • Kexito8

    Gracias Oscar por este artículo. Me he encontrado esta semana con tres casos de la vida real que apoyan lo que escribes en el post: 1) Todavía hay gente que no cree en el poder de internet para potenciar sus ventas y ni que decir de las redes sociales, lo ven como un juego de adolescentes. 2) Personas que dicen que su negocio no se adapta a internet y esto   está muy relacionado con lo que tu dices en tu post porque quizàs están haciendo un buen off-line pero lo podrían hacer mejor  3) Clientes o empresas que creen que estar en internet es montar un sitio web y más nada. Porcierto,  el libro muy didáctico y agradable de leer.  Un saludo desde Venezuela

  • Diego Lopez

    Estoy estudiando Community Manager y por tanto soy novato en esto, pero tengo algunas cosas  muy claras.Me da mucha moral pensar que por mí mismo pueda extraer conclusiones coincidentes con las de un maestro como tú: al proceso “conversión” yo lo llamé “circulo virtuoso”: lo que pretenderé como CM es que los seguidores se transformen paulatinamente en clientes al tiempo que los clientes queden fidelizados y se conviertan en seguidores: CÍRCULO VIRTUOSO !!